¿La vivienda colaborativa es una moda pasajera?
El primer cohousing nació en los países escandinavos en los años 60. Hoy en día hay muchos y se mantienen muy bien.
¿La vivienda colaborativa sólo puede funcionar en los países nórdicos, culturalmente predispuestos a la sociabilidad, o realmente puede tener éxito en países mediterráneos como España o Italia?
Para vivir en cohousing no es necesario tener una mentalidad nórdica, sólo tienes que estar convencido de que es posible relacionarse con los demás de una manera equilibrada. Tienes que sentir y estar conforme en que la contribución de todo el mundo sólo puede mejorar el resultado final. El respeto y la aceptación son la esencia y la normalidad de cada ser humano.
¿Los que viven en vivienda colaborativa deben compartir una creencia o ideología en particular? ¿Debe estar disponible al menos periódicamente a participar en la vida comunitaria?
Es simplemente una forma de vida que se centra en los aspectos de la sociabilidad y en las oportunidades en el uso de los espacios y servicios compartidos, elegidos y organizados por los habitantes. Participar en la vida de la comunidad de vivienda colaborativa es un valor para cada uno, pero nunca es un requisito: todo el mundo es libre de participar en la forma y con la frecuencia que considere más apropiado.
¿Qué espacios o servicios se comparten?
Hay que tener muy claro que los que viven en vivienda colaborativa tienen un alojamiento totalmente privado y completo.
Ejemplos de espacios de uso compartido más habituales :
Lavandería, Taller, Almacén, Wifi, jardín, huerto, espacio para yoga y/o fitness, biblioteca o estudio o sala de cine, guardería, habitación de invitados, cocina-comedor o sala de fiestas.
¿Es más costoso hacer una vivienda colaborativa que un proyecto de vivienda tradicional?
Uno de los objetivos de nuestro modelo de cohousing integral es el precio justo, evitando al máximo todo los gastos o comisiones de intermediarios que no aportan un valor añadido al proceso. Factores importantes son: la financiación del proyecto, si va a cargo de los cohousers o es necesaria financiación externa; la posibilidad de optar a incentivos públicos; la obtención de ventajas por la compra en grupo, que pueden ser en forma de descuentos o en la obtención de productos de más alta calidad.
En general lo que si se evita es el pago del margen o coste de la inversión de un promotor, porque es el propio grupo respaldado con nuestro equipo el que actúa como promotor del proyecto.
¿Viviendas en comunidad de propietarios, en cooperativa o en alquiler?
Dependerá de cada proyecto, todas estas formas de acceso tienen sus peculiaridades y no se descarta que en un futuro bastante inmediato salgan nuevas legislaciones más adecuadas a los intereses del cohousing como la propiedad temporal o la propiedad compartida.
¿En que participo?
La identidad particular de cada cohousing la crean sus futuros residentes a través de un sistema de planificación participativa, que definirá la visión común, los valores que quieren compartir y los criterios para decidir juntos. La planificación participativa se concreta en la configuración de las áreas comunes , los servicios definidos y en la organización de la vida comunitaria en el futuro.
Al tratarse de un proyecto abierto el cohouser también tiene la oportunidad de personalizar su alojamiento privado, escogiendo entre diversas opciones de diseño.
¿Es preferible ser amigos o tener buenas intenciones para crear una vivienda colaborativa?
La vivienda colaborativa que surge de grupos de amigos no tiene porqué funcionar mejor que los que unen a personas en un principio desconocidas. La calidad de una comunidad residencial depende más del acierto en la formación de los grupos.
¿Puedo abandonar la vivienda colaborativa cuando quiera?
Siempre se puede salir y generalmente hay listas de espera de personas interesadas en entrar. Las condiciones las fijara cada grupo en sus estatutos.